Para evitar incómodos tramites, llegado el momento.
En España, siete de cada diez entierros se pagan por un seguro de decesos también conocido como el seguro “de entierro” o “de los muertos”.
Mientras que los seguros de vida y/o accidentes le pueden proteger financieramente en el caso de fallecimiento o invalidez, los seguros de decesos cubren un capital que la compañía destina a un servicio funerario, evitando a la familia cualquier trámite incomodo en esos momentos tan difíciles.
Hoy se trata de un seguro con amplios servicios de asistencia personal, coberturas completas en caso de accidente, traslados y cobertura de repatriación si lo desea además de un gran abanico de posibilidades de contratación.
La comercialización del seguro de decesos lleva más de un siglo y las compañías aseguradoras tradicionales tienen gran parte del negocio en sus manos. Pero, han surgido nuevos productos y formas de calcular el seguro de decesos, y otras aseguradoras importantes ofrecen una dura competencia.
¿Qué es la antigüedad en un seguro de decesos?
Hoy por hoy, no existe la antigüedad en los seguros de decesos puesto que por muchos años que lleve en la compañía no le bonifican la póliza ni le hacen ningún descuento, al revés cada año tendrá un incremento en su recibo con lo cual no tiene ninguna ventaja.
Si existiese antigüedad en el seguro de decesos ninguna compañía podría mejorarle el precio, puesto que tendrían que respetarle el precio de la edad que tenía cuando se contrató la póliza y seguramente usted estará pagando bastante más desde entonces.
Si otra compañía, cogiendo sus edades actuales a día de hoy le ofrece un mejor precio, ¿dónde está la antigüedad?
La antigüedad es un argumento que utilizan las compañías que habitualmente suelen ser las más caras, con el fin de que los clientes no se cambien a otra, siendo la única beneficiada la propia compañía.